¿Has oído hablar de mí?. Mi esencia es celestial y llena de
bendición los mundos sutiles y el terrenal.
Mi emanación se proyecta como luz
radiante, modelando formas. Mis vibraciones cromáticas se substancian con
música angelical, dando calor. Mi aroma divino se vierte, llevando fragancias
sublimes y perfumes celestiales a todo cuanto se baña con mi luz.
Mi aureola…
emite esferas brillantes que rocían una neblina de amor. Y hoy… llego a tu vida
para convertirte en una flor angelical… porque es el deseo de Nuestro Padre que
te procure felicidad. Ven… ven pues a mis brazos, aspira mi energía de amor y
absorbe mi emanación.
Cierra los ojos y visualiza mi luz… mi color. Absorbe mi
aromática esencia. Escucha mi dulce canto angelical que son himnos de amor. Y
recibe paz… tranquilidad… porque primero deberás encontrar armonía dentro de
ti. Después la encontrarás en el exterior.
¡Tú eres la sublime flor de la Creación! Convierte tu vida en un jardín perfumado. Sé dulce y amable. Usa como abono la oración y cosecharás: sólo bendiciones. ¡Cómo te ama Nuestro Padre Celestial! Porque no te puedes imaginar qué bello día te ha preparado para hoy….