(Mateo 14:22-33, Marcos 6:45-52, Juan 6:16-21)
Jesús les dijo a sus discípulos que se metieran en una barca
y fueran al otro lado del mar de Galilea. Después de despedir a la multitud e
ir a rezar a la montaña, Jesús hizo el milagro de caminar sobre el agua.
22. Sana a muchas
personas en Genesaret
(Mateo 14:34-36; Marcos 6:53-56)
Luego de caminar sobre el agua, Jesús y sus discípulos
anclaron la barca en la playa de Genesaret. Los residentes fueron a Jesús, y le
rogaron que les dejara tocar el borde de su manto. Se sanaron con este acto.
23. Sana a una
niña poseída por un demonio
(Mateo 15:21-28, Marcos 7:24-30)
Una mujer pidió a Jesús que sanara a su hija, que era
atormentada por un demonio. Al comprobar la gran fe de la madre, Jesús le
concedió que su hija se sanara.
24. Sana a un
hombre sordo
(Marcos 7:31-37)
Después de irse de Tiro, la gente le trajo a Jesús a un
hombre sordo y tartamudo. Jesús le metió los dedos en los oídos, escupió y tocó
su lengua, diciendo: "Effatá", que significa "ábrete". El
hombre se sanó y pudo oír y hablar bien.
25. Segunda
multiplicación de los panes y los peces
(Mateo 15:29-39, Marcos 8:1-10)
Cuando Jesús estaba en la región de Galilea, había grandes
multitudes de gente pidiendo su ayuda. Cuando una vez hubo cerca de 4000
hombres y sus familias sin nada de comer. Jesús los alimentó milagrosamente a
todos.
26. Sana a un
hombre ciego en Betsaida
(Marcos 8:22-26)
Jesús mezcló saliva con tierra y se la puso a un hombre
ciego en los ojos. También le impuso las manos. Él hombre se sanó y pudo ver.
27. Sana a un
hombre ciego de nacimiento
(Juan 9:1-41)
Jesús sanó a un hombre ciego de nacimiento cuando lo mandó a
lavarse en el estanque de Siloé. Cuando le preguntaron por qué había nacido
así, Jesús dijo que el hombre había nacido ciego para que las obras de Dios se
manifestaran en él.
28. Sana a un niño
poseído por un demonio
(Mateo 17:14-20, Marcos 9:17-29, Lucas 9:37-43)
Los evangelios de Mateo, Marcos y Lucas describen que Jesús
sanó milagrosamente a un niño que estaba poseído por un demonio. Jesús utilizó
esta acción como una enseñanza de fe: Después los discípulos hablaron con Jesús
aparte, y le preguntaron: "¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo?"
Jesús les dijo: "Porque ustedes tienen muy poca fe. De cierto les digo,
que si tuvieran fe como un grano de mostaza, le dirían a este monte: 'Quítate de
allí y vete a otro lugar', y el monte les obedecería. ¡Nada sería imposible
para ustedes!"
29. La moneda en
la boca del pez
(Mateo 17:24-27)
En Cafarnaún, los acreedores de impuestos le pidieron a
Pedro el pago para el templo. Jesús mandó a Pedro a pescar y el primer pez que
atrapó tenía en la boca suficiente dinero para pagar los impuestos.
30. Sana a un
hombre ciego y mudo que estaba poseído por un demonio
(Mateo 12:22-23, Lucas 11:14)
Todas las personas que presenciaron el milagro cuando Cristo
Jesús sanó a un hombre ciego y mudo se preguntaron: "¿Será éste el Hijo de
David?"